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ALVARADO: JUSTIFICACIONES
DE CORRUPCIÓN


César Augusto Vázquez Chagoya
5 de noviembre de 2006


No sabemos qué justificaciones tendrá el gobernador de Veracruz para sostener en sus cargos al secretario de Gobierno, Reynaldo Escobar Pérez, y a la directora de Tránsito, Martha Montoya Barradas, por las recientes 7 muertes en Alvarado, propiciadas por la negligencia en no cumplir con sus deberes oficiales y la responsabilidad de la dirección de Caminos y Puentes Federales de Ingresos del gobierno federal.

El asunto es muy grave. Los de Alvarado han sido muy generosos con el licenciado Fidel Herrera Beltrán. Han votado por él dos veces para diputado federal por ese distrito. En 2000, para senador y para gobernador en el 2004. Hay que reconocer que el mandatario también ha sido generoso y cariñoso con este pueblo mágico que se niega a morir, después que se cerraran las empacadoras y se cayera la pesca.

La congregación de Puente Nacional, ubicada enfrente de Alvarado, y a un costado de la caseta de cobro, nace de la necesidad de comunicación con el sureste del país. No existían antes de 1960, las autopistas Tinajas-Cosoleacaque, ni la Tinajas-Sayula de Alemán. En ese tiempo, forzosamente se tenía que pasar por Alvarado, donde no había puente para llegar a México o a Xalapa, y se tenía que pasar el río Papaloapan en pangas. Horas tardaban en pasar todos tipos de vehículos.

Con estos viajantes, por el tiempo de espera, había necesidad de baños, bebidas, comida, y así los alvaradeños con su lenguaje "florido", llenaban esas necesidades a ambos lados del río. Cuando se hace el puente, ya había una comunidad que fue bautizada como Puente Nacional. Sus habitantes pueden ir para Alvarado sin tener que pagar el peaje por atravesar más de 120 de largo de este portentoso puente sobre el gran "Río de las Mariposas". Es más, no tienen ni que pasar por la caseta de cobro, a menos que quieran ir hacia Lerdo o para el sureste mexicano.

Los de Puente Nacional si quisieran se podrían ir caminando para Alvarado o irse a la caseta de cobro y tomar un camión del servicio público federal, pero crecieron, se crearon escuelas y hubo necesidad de un transporte público para llegar al centro de su cabecera municipal. La concesión del trasporte público estatal la logró Pedro Valencia Ortiz. Este concesionario, en 1992, siendo su paisano gobernador de Veracruz, Dante Delgado, fue la última vez que renovó unidades, gracias al apoyo y la transparencia de los programas de renovación de las unidades en ese entonces.

En diciembre de 1992 llegó al gobierno Patricio Chirinos, quien aumentó el pasaje para renovar los vehículos y casi no dio concesiones del servicio público, porque prefirió regularizar las existentes.

En 1998, llega al poder Miguel Alemán quien fue generoso con los transportistas; los solapó demasiado, al grado de que fue director de Tránsito Mario Olvera de Gasperín, cuñado del líder estatal del pulpo camionero, Carlos Demuner Pitol. En el 2000, es cuando se dio los 5 muertos atropellados en Tzocohuite, en el municipio de Ixhuatlán de Madero, allá en la huasteca veracruzana en el norte de la entidad.

En 2004, el pulpo camionero le regaló un camión al candidato del PRI, Fidel Herrera Beltrán, para la gubernatura del estado. Precisamente en ese año, estando todavía en el gobierno Miguel Alemán, se dio la protesta de los habitantes de Puente Nacional en contra de las unidades chatarras de Pedro Valencia Ortiz, pero nadie les hizo caso. El estado físico de los camiones de Don Pedro son tan deplorables, que una unidad se quedó una vez sin volante, y la situación contrastaba con la absoluta rebeldía del pulpo camionero de pasar "la revista vehicular", que por ley la deben realizar, aunque nunca pudo "convencerlos" Martha Montoya Barradas.

El 1 de noviembre pasado, a las 20.15 horas, la misma unidad que se había quedado sin volante, después de recorrer el 75% del puente hacia Alvarado se precipitó al río Papaloapan, muriendo 7 personas incluyendo un niño de cerca de dos años. El gobernador Fidel Herrera Beltrán fue el más preocupado y mandó ayuda inmediata para rescatar a los pudieran estar vivos. La Armada de México participó esa misma noche con sus buzos. Ya nada se pudo hacer.

En la misma madrugada del día 2 de noviembre, las restantes 3 unidades de Don Pedro desaparecieron al igual que su dueño. Llegó mucha prensa y no querían que las vieran. Esa misma madrugada, la señora directora de Tránsito del Estado, repartía como volantes la autopsia de ley que le hicieron al chofer del camión José Manuel Uscanga Delgado, y resultó que al señor al parecer por el "vértigo a las alturas" le dio un "infarto fulminante". Nunca sintió tan siquiera un piquete, mareo, falta de aire, etc., para poder parar la unidad. Tenía 39 años. Su cobrador de 56 años, José de Jesús Oliver Pérez, murió ahogado.

Pero falta más. Por meses, y de eso somos testigos, el puente a cargo del gobierno federal estuvo en reparación, sólo que nunca se ha previsto que en un choque pueda haber una real barrera de contención. Actualmente, la única barrera son unos tubos de tres pulgadas podridos, agarrados a tubos PVC y de ahí a pilotes de concreto, pero no tuvo suerte el camión de Don Pedro de chocar con estos pilotes y evitar la caída. En la misma noche del accidente, se aprecia en una foto tomada por Alberto Morales, que la mitad del puente estaba a oscuras y eso que había sido recientemente reparado.

La primera versión oficial del accidente sólo se la cree la directora de Tránsito Martha Montoya Barradas, porque los de Alvarado y los habitantes de Veracruz no. Todos los días vemos los camiones chatarras. Si usted no quiere creer que pareciera que las autoridades nos consideran muy tarados, Tránsito de Veracruz, con "todas las trompetas jadeantes", anuncia el 3 de noviembre el retiro de todas las unidades chatarras del estado de manera inmediata. Ahora sí, la frase "Después de ahogado el niño, tapan el pozo". ¿Como se llama a esto por acción u omisión? Corrupción pura.

El retiro de las unidades "chatarras" es un reconocimiento del gobierno de Veracruz de que se solapaban las unidades del transporte público que han propiciado tantas muertes y heridos. Por lo anterior, hay responsables con nombres y apellidos. Todavía no se sabe porqué no se publica la nueva Ley del Transporte de parte del secretario general de Gobierno, Reynaldo Escobar, jefe del sector del transporte.

El gobernador de Veracruz, reflexivo, no descarta que el accidente sea por una falla mecánica del camión de pasaje, pero eso se sabrá hasta que saquen al camión del canal de navegación del río de las mariposas. Dice que quien pagará las indemnizaciones correspondientes es el dueño del camión, pero no sabemos cómo será, porque si así traía sus unidades, se duda que estuviera pagando seguros del viajero siendo tan caros. Tampoco es válido el seguro del puente, porque estos infortunados no pagaron el peaje que da derecho a las indemnizaciones, ya que no tienen que pasar por la caseta de cobro.

Los de Alvarado sólo quieren justicia de su amigo el gobernador de Veracruz.







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