Vino a Xalapa el entonces director de BANOBRAS, Tomás Ruiz González, en el 2003, para anunciarnos que se daría un crédito de más de 500 millones de pesos para las obras de saneamiento de Xalapa, así como para introducir en varias colonias el agua potable. El crédito sería dado al ayuntamiento de Xalapa presidido por Reynaldo Escobar Pérez, con 200 millones de pesos para fondo perdido, siendo el aval el Gobierno del Estado encabezado por Miguel Alemán Velasco. Ruiz González, en ese tiempo quería se gobernador de Veracruz, pero ahora renunció al tricolor y es director de la Lotería Nacional.
Alemán, como fue su política, nunca vigiló lo que hacía en ese entonces “el primer alemanista del estado” y Reynaldo otorgó por una licitación internacional el contrato a la compañía “Aguas Tratadas de Xalapa” (ATX), a quien le dio todos los plazos y favorecimientos para su trabajo, inclusive que en caso de un pleito legal entre el ayuntamiento xalapeño y la ATX, éste se efectuaría en los tribunales de Francia, allá en el lejano viejo continente. Así que el hoy funcionario, como ATX, no creen en la justicia veracruzana, ni mexicana y sí en la justicia extranjera.
El afable alcalde de Xalapa en sólo cuatro años hizo una inexplicable fortuna y todavía fue premiado al ser nombrado como secretario general de Gobierno; y en un año y medio en el cargo, son conocidos sus diversiones “teiboleras”, sus llegadas al trabajo en estado etílico, y el estar peleado con todos los grupos políticos dentro del PRI, sobretodo “mordiéndose” con los dirigentes de Convergencia y el PAN, siendo inexplicablemente el encargado de la política interna del estado. Un negociador sin interlocutores.
El señor, en un año del fidelismo, ha tenido muchos desatinos verbales. “Tiene incontinencia verbal”. Dice una cosa y hace otra. La penúltima es que metería a la cárcel a los de la compañía “Rodríguez Pasquel Sucesores”, quien le ganara un juicio a la Universidad Veracruzana por casi 73 millones de pesos por no pagar el alquiler y no devolver las más de mil computadoras que les rentó desde 1999, lo que ha levantado la indignación de la CANACINTRA de Orizaba contra su socia por parte del Gobierno del Estado, porque el poder ejecutivo pretende cambiar los fallos del poder judicial del estado y de la federación.
A Reynaldo Escobar Pérez, quien dice que es el único abogado veracruzano en ganar dos controversias constitucionales y litigar por más de 30 años y ser un catedrático (maestro de la facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana) se le olvidó el lunes 29 de mayo de las división de poderes en Veracruz, y arremetió en contra del poder legislativo al llamarlos “cerrados y flojos” y al poder judicial por tener en las cárceles a los delincuentes menores y a los grandes en la calle.
Este 30 de mayo, el presidente del Tribunal Superior de Justicia, René Pobrete Dolores, de plano no le contestó “tirándolo a loco”. El presidente de la Legislatura, Ramiro de la Vequia, manifestó que desconoce el trabajo legislativo; y el diputado Atanasio García Duran, sonriendo dijo que las “cosas deben tomarse de quien vienen”. ¿Lo dicho por Reynaldo es verdad?
Para nuestra desgracia es cierto, pero no descubre el “agua tibia”. La Cámara de Diputados veracruzana, no sólo es cómoda y floja, sino que ha violado la constitución local y de la república en varias ocasiones, aparte de que se han subido el presupuesto dos veces y de 170 millones anuales, ya casi llegan a dos años en gastarse cerca de 300 millones de pesos.
Desde la Cámara de Diputados se están realizando campañas federales, llenaron de propaganda política el recinto, y los vehículos de cada diputado local están metidos en las campañas ¿Eso no es desvío de recursos públicos?
En el poder judicial, es cierto que los verdaderos delincuentes están en las calles: entre ellos Reynaldo Escobar, porque nadie lo enjuicia por su fortuna inexplicable y nadie lo culpa ante la evidente corrupción en el manejo de los recursos para las obras de saneamiento de Xalapa, pero eso es lo de menos.
L a corrupción entre jueces y secretarios es evidente, y no se va a frenar con bonitos edificios o poniendo cámaras para vigilar sus actuaciones dentro de los juzgados, porque ese programa ya se puso en funcionamiento cuando fue Procurador de Justicia Eduardo Andrade Sánchez y fue un completo fracaso. A los funcionarios judiciales, con sus raquíticos sueldos, se les agudiza el ingenio y van a ser tontos si reciben dinero enfrente de empleados o de las cámaras. Las cámaras son una ofensa a la dignidad al trabajo, en donde debería prevalecer la justicia y la confianza en los empleados. La problemática judicial no es tan ligera.
Así que el encargado de la política interna del estado, como los burros debe también revisarse las orejas, ya que el poder ejecutivo, que si bien es cierto el gobernador es muy trabajador, también es cierto que se ha frenado el enjuiciamiento de los alemanistas corruptos. No se ha dado a conocer la corrupción en Tránsito del Estado en el sexenio pasado con la entrega de más de 8 mil concesiones del servicio público.
Para no hablar sólo del pasado, se ha dicho todo y no se ha hecho nada en los más de mil millones de pesos que se llevó Rafael Herrerías cuando manejó los Tiburones Rojos de Veracruz, donde era dueño de los mejores jugadores comprados con dinero de Veracruz. En la bancarrota dejó al equipo profesional de fútbol y nadie del poder ejecutivo ha levantado un dedo para recuperar el dinero de los impuestos de los veracruzanos.
En justicia, el amigo del gobernador, ex alcalde de Orizaba, Martín Cabrera Zavaleta, con orden de aprehensión por abuso de autoridad y peculado, se pasea por las calles de Orizaba y de la capital del estado. La ex síndica de Minatitlán. Juana Isabel Morales Aguirre, quien matara a su marido el 11 de marzo pasado, anda en restaurantes de Minatitlán y aquí en Xalapa el director de la Policía Ministerial dice que la buscan hasta la INTERPOL.
Para terminar y para saber cómo se las mascan los poderes en Veracruz, el poder ejecutivo en el ejercicio fiscal del 2005, tuvo en varias dependencias varios subejercicios, es decir, tenían dinero y no se lo gastaron en obras o programas sociales, habiendo 4 millones de pobres y lo anterior es también una forma de corrupción.
Así que el burro hablando
